Investigadores descubren por primera vez que:
Durante el sueño, la reacción del cerebro respecto del sonido sigue siendo fuerte, pero desaparece una característica crucial de la atención consciente.
- El estudio reveló que la reacción del cerebro respecto del sonido sigue siendo fuerte durante el sueño en todos los parámetros excepto uno: el nivel de ondas alpha-beta, conocidas por estar asociadas con la atención. Esto significa que en el sueño, el cerebro percibe la entrada auditiva pero no puede concentrarse en los sonidos para identificarlos conscientemente.
- De los Investigadores: "Nuestros hallazgos aportan la primera medida cuantitativa de su tipo que es única para las personas que están conscientes, escuchando y que pueden comprender lo que oyen, y que desaparece durante el sueño”.
Un nuevo descubrimiento de la Universidad de Tel Aviv podría aportar la clave para un gran enigma científico: ¿Cómo hace el cerebro despierto para transformar las entradas sensoriales en una experiencia consciente? El revolucionario estudio se basó en datos recolectados de electrodos implantados, con propósitos médicos, en el cerebro humano. La información fue usada para estudiar las diferencias entre la respuesta de la corteza cerebral a los sonidos durante el sueño en oposición a la vigilia.
Los investigadores se sorprendieron al descubrir que la respuesta del cerebro al sonido continúa siendo fuerte durante el sueño en todos los parámetros excepto uno: el nivel de ondas alpha-beta asociadas con la atención a las entradas auditivas y las expectativas relacionadas. Esto significa que durante el sueño, el cerebro analiza las entradas auditivas pero no le es posible focalizarse en el sonido ni identificarlo, y por lo tanto, no se produce una percepción consciente.
El estudio fue liderado por la Dra. Hanna Hayat con la colaboración fundamental de la Dra. Amit Marmelshtein, en el laboratorio del Prof. Yuval Nir de la Escuela de Medicina, la Escuela de Neurociencias Sagol y el Departamento de Ingeniería Biomédica, co-supervisado por el Prof. Itzhak Fried del Centro Médico UCLA. También participaron: los Dres. Aaron Krom y Yaniv Sela del Grupo Nir, y los Dres. Ido Strauss y Firas Fahoum del Centro Médico Sourasky Tel Aviv (Ichilov). El trabajo fue publicado en la prestigiosa revista Nature Neuroscience.