14.08.2020 | 00:00 hs.
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Amigos Universidad de Tel Aviv
AMIGOS DE LA UNIVERSIDAD DE TEL AVIV
NANOCIENCIA Y NANOTECNOLOGÍA
El potencial ilimitado de una millonésima de milímetro
¿Se acuerdan de Steve Austin, el “Hombre Nuclear”? Austin era el protagonista de una serie de televisión de los años 70, cuyas extremidades le habían sido reemplazadas con implantes biónicos luego de un accidente. Después de la cirugía, Austin descubrió que sus piernas nuevas podían correr a una velocidad de 100 km por hora, su brazo derecho podía levantar maquinaria muy pesada y sus ojos podían distinguir pequeñísimos detalles desde una enorme distancia, mejor que cualquier teleobjetivo. Gracias a todo esto, Austin pudo combatir el delito en representación de una agencia gubernamental secreta.
Lo que hasta hace apenas 40 años parecía posible únicamente en el campo de la ciencia ficción, ahora podría hacerse realidad, gracias a investigadores de la Universidad de Tel Aviv que están desarrollando un ojo biónico a través del uso de nanotecnología. El proceso se basa en la creación de un implante retinal artificial que podría beneficiar a cientos de miles de personas en un futuro no tan distante. Esto constituye un avance sin precedentes, que reúne un extraordinario conjunto de innovaciones de vanguardia del Centro para Nanociencia y Nanotecnología de la Universidad de Tel Aviv, que incluye la primer droga de su tipo contra el cáncer: un medicamento dirigido que hace innecesaria la intervención quirúrgica; un material orgánico más fuerte que el acero utilizado para la construcción, y otras muchas innovaciones increíbles.