Una Investigación de la Universidad de Tel Aviv descubre que la vista de los adolescentes mejora cuando están ocupados en el juego
Los videojuegos violentos, de acuerdo a un nuevo estudio de la Universidad de Tel Aviv, también pueden mejorar la visión del mundo real de los adolescentes que juegan con ellos.
“Como padre y científico dedicado al cerebro, me preocupé mucho cuando mis chicos crecían y jugaban a los videojuegos”, dice el Dr. Uri Polat del Instituto de Ojos Goldschlager de TAU que llevó a cabo el estudio conjuntamente con la Universidad de Rochester. “Lo que vemos ahora es que los adolescentes que juegan con videojuegos violentos también están entrenando sus cerebros para ver mejor.” Los resultados del estudio fueron presentados recientemente en la revista Nature Neuroscience.
Sombras de Gris
El Dr. Polat y sus colaboradores compararon los efectos de jugar juegos de acción violentos como “Unreal Tournament 2004” y “Call of Duty 2” con otros videojuegos que no requieren altos niveles de coordinación visual-motora como “The Sims.”
En el reciente estudio participaron 22 adolescentes video-jugadores a quienes se los separó en dos grupos. Uno de los grupos jugó con juegos violentos mientras que el restante, con “The Sims 2”. Luego de jugar 50 horas con el juego asignado durante 9 semanas, se descubrió que los chicos que jugaron los videojuegos más violentos mostraban una mejora de un promedio del 43% en su habilidad para discernir entre sombras de gris muy juntas. Aquellos jugadores a los que se les había asignado jugar con “The Sims 2” no tuvieron ninguna mejora.
“Creemos que los juegos están llevando la corteza visual del cerebro al límite, forzándola a adaptarse a los estímulos agregados de los juegos de acción”, concluye el Dr. Polat.
Entre los sujetos sometidos a la prueba, los investigadores pudieron medir una mejora de hasta el 58% en sensibilidad de contraste. Y los efectos fueron aún mayores para aquellos jugadores con gran habilidad en los juegos de tiros en primera persona. Hasta ahora, los especialistas de ojos creían que no era posible mejorar esta clase de sensibilidad visual sin intervención médica (quirúrgica).
Si bien las habilidades sociales de un adolescente pueden verse afectadas negativamente con la adicción a los videojuegos, los efectos sobre el sistema visual parecen ser positivos, concluyeron los investigadores.
Continuando con el trabajo de investigación previo del Dr. Polat en el tratamiento del fenómeno del “ojo perezoso”, el equipo Universidad de Tel Aviv-Rochester aspira a aplicar el uso de los videojuegos para mejorar la visión de adultos, adolescentes y niños.